En un concurrido mercado de Gurugram, la moderna y bien equipada ciudad a 30 km del centro de la capital, Nueva Delhi, la Fundación We Are Water, construyó un retrete falso para hombres y mujeres. En el interior, en vez del inodoro y el lavabo, los necesitados transeúntes se encontraban con la realidad de 250 millones de sus compatriotas que tienen que acceder a las vías férreas, los campos abiertos, los caminos, los arbustos y las calles para defecar. En el interior de este falso retrete muchos descubrían también la realidad de las mujeres de su país que tienen que dejar la escuela al llegar a la pubertad por falta de la necesaria privacidad para practicar su higiene íntima.
La campaña logró conmover y lograr el apoyo de los que participaron en el experimento presencial y sirvió de lanzamiento de la actividad en Twitter de la Fundación We Are Water en India.