Distrito de Gatsibo, Provincia Este, Ruanda
Con la colaboración de
Octubre 2021-Septiembre 2022
Mejorar las condiciones de salubridad de los refugiados que provienen de la República Democrática del Congo. Construcción de un bloque de 10 letrinas y otro de 10 duchas. Creación de dos puntos de recogida de basuras para garantizar una gestión adecuada de los residuos sólidos.
Objetivos
- Mejorar las condiciones de salubridad en el campo de refugiados congoleños de Nyabiheke.
- Mejorar la higiene y el acceso a instalaciones de saneamiento adecuadas.
- Alcanzar el estándar recomendado de 20 personas por pozo y aumentar el acceso a las instalaciones de saneamiento por parte de toda la comunidad de refugiados.
Beneficiarios
485 directos
209 niños menores de 15 años y 250 mujeres.
14.549 indirectos
7.420 niños menores de 15 años y 7.834 mujeres.
La totalidad de la población alojada en el campo de refugiados, dado que todas las instalaciones serán comunitarias y compartidas
Sobre el terreno
Los refugiados provienen de la República del Congo y han huido de su país a causa de la situación política y social. Las instalaciones de saneamiento e higiene son muy antiguas y no ofrecen los mínimos de privacidad y seguridad.
Actualmente el campamento de refugiados de Nyabiheke alberga a 14.549 personas, de las cuales el 46,2% son hombres y el 53,8% mujeres. El 51% son menores de dieciocho años, el 45% tienen de 18 a 59 años y el 4% son mayores de 60 años.
Las instalaciones de saneamiento son muy antiguas y no ofrecen los mínimos de privacidad y seguridad. Las familias comparten letrinas que se construyeron con la creación del campamento en 2005. Las duchas existentes también son muy antiguas y necesitan una rehabilitación completa para garantizar la privacidad y la seguridad, en especial de las niñas y mujeres que viven en el campo.
También es necesario construir puntos de recogida de basura para garantizar que los residuos sólidos no estén dispersos por el campamento; especialmente las mascarillas usadas y desechadas, pero también el resto de residuos deben ser gestionados para evitar la propagación de enfermedades y proteger el medioambiente.
Por otro lado, es importante mejorar la conciencia sobre la importancia de la higiene y el saneamiento para prevenir enfermedades en la población beneficiaria.
En detalle
Con la participación de los beneficiarios, se construirán un bloque de 10 letrinas y un bloque de 10 duchas. Además, se instalarán dos puntos de recogida de basuras para garantizar una gestión adecuada de los residuos sólidos (clasificación, recogida, transporte y eliminación).
Los diseños de duchas y letrinas se harán teniendo en cuenta las necesidades específicas de hombres y mujeres, priorizando a la población más vulnerable: personas con discapacidad, ancianos/as y otras con necesidades específicas, asegurando la inclusividad en el proyecto.
El MINEMA (Ministerio de Gestión de Emergencias / Gobierno de Ruanda) facilitará la ubicación de estas letrinas y bloque de duchas en los sectores que tienen mayor necesidad.
Se creará un comité de saneamiento en cada comunidad. Su función principal será sensibilizar sobre las buenas prácticas, el buen uso y mantenimiento de las instalaciones construidas, así como su apropiación por parte de toda la comunidad de refugiados. Además, se formará a técnicos del campo en la reparación y mantenimiento de las infraestructuras.
La comunidad del campo de refugiados participa en todo el proceso, desde la planificación, hasta la implementación de las actividades, el seguimiento al proyecto y su evaluación. La construcción y rehabilitación de las instalaciones se realizará por constructores calificados, que serán seleccionados a través de un proceso participativo estándar de World Vision;éste empieza con la identificación específica de las necesidades en el terreno, en el que participan los beneficiarios, previo al proceso de licitación.
Durante la implementación, las comunidades apoyan en el seguimiento de las obras y aportan sugerencias de mejora si es necesario. Los comités, formados por voluntarios de la comunidad, contribuirán en las acciones de formación.
El proyecto se implementará de manera complementaria a las intervenciones de agua, saneamiento e higiene (ASH) ya existentes en el campo de refugiados, de acuerdo con un plan de trabajo que contribuirá a implementar de manera efectiva todas las actividades del proyecto y, por lo tanto, a cumplir con los tiempos establecidos y evitar retrasos en la ejecución.
Los materiales de construcción se adquirirán en un comercio local. El ingeniero de World Vision, el facilitador de ASH y el gerente del proyecto garantizarán la supervisión de las actividades de construcción y rehabilitación e informarán del avance. Esto contribuirá a alinear los objetivos y metas del proyecto, minimizar los posibles riesgos y cumplir los objetivos sin superar el coste presupuestado.
El proyecto contribuirá a aumentar el acceso a instalaciones de saneamiento en el campo de refugiados y, por lo tanto, reducirá los problemas que la falta de éstos ocasiona, en términos de salud y de convivencia. También permitirá la reducción en la incidencia de enfermedades relativas al acceso a saneamiento básico e higiene, sobre todo en mujeres, niñas y niños. La gestión adecuada de los residuos sólidos (recogida, clasificación, transporte y eliminación) contribuirá también a reducir la incidencia de enfermedades y a que el medio ambiente y el entorno sean seguros.
La gestión de los residuos sólidos servirá para producir estiércol, que a su vez se utilizará en el desarrollo agrícola, tanto en el huerto del campamento como en los cultivos de la comunidad de acogida. Una vez finalizado el proyecto, habrá una mejora sostenida de la salud y el bienestar de la comunidad de refugiados en el campamento, específicamente para los niños y niñas.
Perspectivas de sostenibilidad
La creación y apoyo a los comités de saneamiento en los sectores donde se construirán las letrinas y duchas contribuirá a crear un sentido de propiedad que garantizará la sostenibilidad de las instalaciones de ASH en general.
La comunidad de refugiados participará en la implementación del proyecto durante la fase de construcción aportando mano de obra no calificada. Su participación en el análisis de problemas y en el planteamiento de soluciones asegurará la viabilidad y sostenibilidad del proyecto. Las instalaciones servirán igualmente a la comunidad y los comités de saneamiento creados apoyarán en la concienciación sobre la necesidad de higiene y sensibilización sobre su buen uso. Los diseños consideran el enfoque de género y la situación de las personas con discapacidad y, a través de los clubes comunitarios de higiene del campamento, se empoderará a la comunidad para que puedan hacer un uso adecuado y dar mantenimiento tanto a las duchas como a las letrinas.
Para asegurar la sostenibilidad en el proyecto, se trabajará con técnicos de la comunidad de refugiados que tengan conocimientos y experiencia en obras de construcción y rehabilitación. Una vez finalizado el proyecto, la propia comunidad de refugiados realizará la reparación y el mantenimiento de las instalaciones construidas y los comités y los promotores de higiene monitorearán la limpieza diaria de letrinas y duchas. Además, todas las instalaciones de saneamiento que se construirán con materiales duraderos, de modo que puedan seguir siendo utilizadas por la comunidad de refugiados por mucho tiempo