Sobre el terreno

Crisis educativa, pobreza y contaminación

En el asentamiento de Rwamwanja, la mayoría de los refugiados son congoleños que huyen de la violencia. Los problemas de acceso al agua, saneamiento e higiene universal son notorios y se extienden a las comunidades de acogida; la higiene es deficiente y las instalaciones de saneamiento también. Según los informes mensuales de ACNUR, el promedio de agua diaria por persona y día en el asentamiento es de 13,7 litros, por debajo de su estándar de 20 litros per cápita al día. Los puntos de agua disponibles se encuentran a un radio de más de dos Km de la escuela primaria Mahega, y los manantiales, que también forman parte de las fuentes disponibles, no son seguros para beber ya que están siempre contaminados.

La única fuente de agua de que dispone la escuela es un tanque de recolección de agua de lluvia, lo que dificulta el acceso a agua potable especialmente en la estación seca.

Las bombas manuales (tipo Hund) son el sistema de bombeo de agua más utilizado, pero son propensas a averías y, por el tiempo que se tarda en bombear el agua, se generan largas colas en la recolección. Las largas distancias y demoras en la recogida de agua exponen a los niños y las mujeres a la violencia, incluida la sexual. Esta situación provoca una gran tensión en la población. El acceso actual al agua en el asentamiento es de sólo el 65% y, para las personas que se ven obligadas a comprarla, un bidón de 20 litros se vende a 0,29 dólares americanos.

La falta de agua y saneamiento adecuados también se da en los centros de salud, lo que causa prácticas de higiene deficientes. Por otra parte el mantenimiento defectuoso de las instalaciones empeora la situación. La escuela primaria Mahega es uno de los centros afectados, lo que hace que sus estudiantes, especialmente las niñas, estén más expuestas a la violencia y sean más propensas a brotes de enfermedades relacionadas con el agua en mal estado, como el cólera o las enfermedades diarreicas.

En detalle

La comunidad del campo de refugiados participa en todo el proceso, desde la planificación e identificación de necesidades, hasta la implementación de las actividades, el seguimiento del proyecto y su evaluación.

La construcción y rehabilitación de las instalaciones será realizada por constructores cualificados, que serán seleccionados entre la población local.

Los padres de los alumnos y maestros de la escuela participarán en los Comités de Administración Escolar movilizando la conciencia pública y construyendo un fuerte sentido de propiedad a través de eventos sociales.

Formaremos Clubes de Salud para promover las buenas prácticas de higiene y uso y mantenimiento de las instalaciones. También crearemos comités de voluntarios de la comunidad que contribuirán en las acciones de formación.

En primer lugar, realizaremos la prueba de la bomba existente para determinar el rendimiento real del pozo. Realizaremos también una prueba de calidad del agua. A partir de aquí diseñaremos el sistema durante el primer año y éste proveerá de agua a la escuela primaria Mahega y la comunidad circundante.

La energía solar alimentará la motorización lo que permitirá el funcionamiento de una bomba sumergible. Ésta suministrará agua a 2 depósitos de plástico con capacidad de entre 5.000 y 10.000 litros que estarán en una torre de seis metros de altura. Colocaremos tres puntos de agua (1 en la comunidad y 2 en la escuela) a través de tuberías de distribución. Con el fin de mejorar los comportamientos de higiene entre los niños, el proyecto reactivará y capacitará al club de salud escolar y a los maestros sobre algunos de los temas clave de agua, saneamiento e higiene en la escuela. Con el fin de garantizar la sostenibilidad de las instalaciones en la escuela, el proyecto reactivará y capacitará al club de higiene, a los maestros y al comité de administración de la escuela sobre la operación y el mantenimiento. En la comunidad circundante, a la que también llegará el sistema de agua por tubería, estableceremos comités de usuarios de agua y los capacitaremos para administrar el funcionamiento de los grifos públicos. Para ello realizaremos un taller para compartir el proyecto y definir responsabilidades con las partes interesadas clave y reuniones de sensibilización de la comunidad sobre los requisitos críticos del nuevo proyecto de agua.

Perspectivas de sostenibilidad

El proyecto se ha diseñado y se implantará con la participación de ACNUR, la Oficina de Gobierno Central, el Gobierno del Distrito de Kamwenge, la Compañía Nacional de Agua, el Comité de Gestión del Colegio, y la Asociación de Padres, Profesores y Alumnos, lo que garantiza su viabilidad y adecuación a la realidad de Rwamwanja y de la escuela de Mahega en particular.

World Vision seguirá operando en el asentamiento con otros proyectos existentes y el personal técnico del subcondado se encargará de la supervisión del proyecto, ya que participará en él desde el principio. Los comités de gestión escolar (SMC) gestionarán el proyecto y los comités de usuarios del agua, se encargarán del funcionamiento y el mantenimiento del sistema. Los comités también estarán vinculados a la Corporación Nacional de Agua y Alcantarillado, responsable de la operación y mantenimiento de toda la infraestructura de agua en el asentamiento.

Las autoridades escolares tienen el compromiso presupuestario de apoyar a las comunidades para el correcto funcionamiento y mantenimiento de los sistemas rehabilitados para garantizar la sostenibilidad de las diversas intervenciones Las estructuras escolares también estarán facultadas para mantener las instalaciones de agua, saneamiento e higiene mediante el desarrollo de sus capacidades en materia de gestión, operación y mantenimiento de instalaciones de agua, saneamiento e higiene. El proyecto trabajará con educadores de salud y / o funcionarios educativos que son responsables de la implementación de los programas de agua, saneamiento e higiene en las escuelas para llevar a cabo visitas escolares regulares con la finalidad de rastrear el progreso de las actividades en la escuela.