Sobre el terreno

Leyte, una de las provincias más pobres de Filipinas, fue una de las regiones más castigadas por el tifón. La destrucción de los sistemas comunitarios de agua obligó a la población a usar fuentes contaminadas.

Las Visayas Orientales ya eran la región más pobre del país antes del paso del tifón, con un 37% de la población viviendo bajo el umbral de la pobreza. De esta región, una de las provincias más castigadas fue Leyte. Una de las consecuencias del Haiyan fue la destrucción de los sistemas comunitarios de agua, lo que obligó a la población a usar fuentes contaminadas, reducir el consumo de agua para actividades no esenciales y a depender de la ayuda externa.

En detalle

En la actual fase de reconstrucción, la prioridad es rehabilitar los sistemas de suministro de agua, supervisar la calidad y tratarla. Este proyecto planea hacerlo en la provincia de Leyte, donde se han identificado los municipios más necesitados con consultas de campo y analizado factores como el alcance del daño causado por el tifón, la necesidad antes del desastre y la presencia de otras ONG. World Vision ha clasificado los municipios según la severidad de la necesidad actual, para definir en cuáles se llevará a cabo el proyecto y las intervenciones complementarias. También se tienen en cuenta criterios como el número de personas discapacitadas, desplazadas, mujeres embarazadas, menores de 5 años y familias monoparentales para la selección de los beneficiarios. Una vez especificada la zona de intervención, rehabilitaremos 8 sistemas de agua comunitarios, 6 de nivel 1 (que consta de 4 ó 5 pozos, colectores de agua de lluvia o fuentes dotados con una bomba manual), y 2 de nivel 2 (grifos comunitarios conectados por cañerías a un depósito y a una fuente de agua con más caudal). Esto permitirá dar acceso a agua potable a 900 familias, es decir, unas 4.500 personas. Paralelamente trabajaremos planes de seguridad del agua con los 8 comités de agua y saneamiento que organizaremos y capacitaremos en las comunidades, usando una estrategia de base comunitaria. Esto es esencial para conseguir un acceso sostenible al agua potable. Complementariamente, implementaremos procesos de sensibilización sobre higiene y cuidado medioambiental, para cambiar las prácticas que ponen en riesgo la salud de 4.500 personas directamente y 3.000 indirectamente.

¿Por qué en el en la población de Leyte?

La mayoría de los 2.200.000 de habitantes de Leyte necesita ayuda, entre otras cosas para acceder a agua y a un saneamiento adecuado. El principal problema que se plantea resolver el proyecto es dar acceso a agua potable a 4.500 personas de Leyte y asegurar la sostenibilidad del acceso. Complementariamente se implementarán procesos de sensibilización sobre higiene y cuidado medioambiental, para cambiar las malas prácticas higiénicas y medioambientales que ponen en riesgo la salud de miles de personas.
El proyecto se enmarca en el programa de reconstrucción de World Vision y la Fundación We Are Water, que incluye acciones de salud, seguridad alimentaria, recuperación de la agricultura, la pesca y otros medios de vida, reconstrucción de infraestructuras (especialmente centros de salud y escuelas) y formación a los gobiernos locales en gestión y protección infantil.

¿Qué haremos?

1. Construcción de 6 sistemas de agua de nivel 1.
2. Construcción de 2 sistemas de agua de nivel 2.
3. Organización y formación a 8 comités de agua.
4. Sensibilización a las comunidades sobre higiene y protección del medioambiente (1 por barangay).

¿Qué impacto social tendrá el proyecto?

El impacto directo del proyecto será una mejora en el bienestar, especialmente e la salud, de 4.500 personas directamente al darles acceso a agua segura para beber y cocinar, lo que permitirá reducir la incidencia de enfermedades vinculadas a la ingesta de agua no potable. También habrá un impacto en las condiciones de salubridad de los barangayes beneficiarios, que beneficiará a 7.500 personas. Esto mismo tendrá un impacto positivo en el medioambiente.